2017 “AÑO DE LAS OPORTUNIDADES”

  

Hare una de las cosas que más me encanta hacer, escribir, realmente disfruto hacerlo, más aún cuando se trata de revisar las páginas del libro de mi vida. Pocas ocasiones nos dedicamos el tiempo a revisar cada uno de los momentos y facetas de la vida, nos dejamos llevar por el día a día, por las labores cotidianas sin prestar mayor importancia a cosas tan elementales como nuestro bienestar.

Ahora es tiempo de revisar las 365 páginas de mi vida durante el 2017, ciertamente aún no termina el año, pero han transcurrido sucesos importantes que han marcado mí vida, ¡Gracias Dios por permitirme experimentar tantas cosas! Para mí todos los acontecimientos de la vida son oportunidades que nos permiten crecer, siempre y cuando tengamos una amplia visión para desarrollar soluciones y superar los vientos adversos que son comunes a la realidad humana. 

Soy consciente que la vida es un experimento, quizás el más grande de los experimentos, a través del cual el ser humano va moldeando su esencia y razón de ser, es el espacio idóneo para formarnos y dignificarnos como personas. Mi experiencia es el mayor recurso teórico para hacer esta afirmación; ahora describiré algunas vivencias durante este año.

Me he considerado siempre una persona de éxito, siempre logro lo que me propongo, gracias a Dios y a las personas que creen en cada una de las cosas que hacemos, el peor error del ser humano es confiase del éxito, esto fue lo que me sucedió a mí, entre en mi zona de confort, luego de haber alcanzado mi principal meta mi dinámica de trabajo cambio y fue un poco más pasiva;  esta situación fue influenciada por el dominio de las emociones, deje que los sentimientos me dominaran y apagaran mi sonrisa, mis ilusiones y aspiraciones, pensar en una persona, que nunca pensará en mí, es quizás el peor error que he cometido, pero bueno, son circunstancias de la vida que nos ayudan a redescubrirnos, a tropezar pero sobre todo a re - dignificarnos, es así cuando nos damos cuenta del gran valor que tenemos y como nosotros mismos nos opacamos.

Palabras sabías las de Facundo Cabral “La vida no nos quita cosa, nos libera de cosas” gracias a Dios estas reflexiones han llegado en el momento oportuno a mí vida, este año la vida me libero un amigo a quien en algún momento consideré un hermano, será por el apego y las vivencias que desarrollamos juntos, pero bueno, realmente las cosas pasan por algo, ya Dios tiene todo escrito, aunque resiento lo sucedido, me toca ver hacia adelante y ver con quienes realmente cuento, y saber de qué tipo de personas voy a rodearme, todo sea por mi bienestar, no puedo seguir pensando en los demás, sin antes pensar en mí. 

También tuve la oportunidad de conocer grandes personas, a quienes admiro, aprecio y respeto, esas personas me inspirar para continuar con energías, serenidad y compromiso aportando al desarrollo de mi nación. ¡Gracias a ustedes porque me han ayudado a mantenerme firme! Mi familia y sobrinos han sido mi principal soporte, las sonrisas, los abrazos, los enojos y sus energías me brindan aliento, realmente los amo, de igual manera mis amigos me han permitido escuchar consejos, regaños y motivación para ver al futuro con optimismo, gracias a ustedes por el cariño, amor y respeto, por hacerme parte de sus familias.

Han pasado cosas maravillosas en mi vida, tener mi casa, aunque es un compromiso por 20 años, me inspirara responsabilidad y disciplina para enfocarme en mi vida, mamá se sintió alegre con la notica, algo que al inicio me preocupaba mucho, pero ahora tengo más calma porque esta noticia provoco sentimiento de alegría; el doctorado en desarrollo humano sostenible es quizás un premio para mí, realmente quería estudiar ese doctorado, es un área a fin a los escenarios en los cuales he venido trabajando y me identifico plenamente con las líneas del doctorado, estoy muy emocionado por iniciar este nuevo reto de aprendizajes, intercambio cultural y experiencias por escribir.

Gracias infinitas Dios por este mundo de oportunidades, si me caigo, seas tu quien me ayudes a levantarme. ¡Así sea!